Debido a colapso de la represa de Brumadinho en enero, minera brasileña Vale reportó este jueves una pérdida neta de US$1.640 millones en el primer trimestre. Los ingresos también cayeron un 4.6% a US$8.200 millones debido a menores ventas, ya que varias minas fueron paralizadas como consecuencia del desastre.
Vale, la mayor productora de mineral de hierro del mundo, debió lidiar con las consecuencias del colapso de la represa, que se ha configurado como uno de los mayores desastres del sector en el país.
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Vale tuvo que hacer una serie de provisiones por los costos del desastre, incluidos US$2.420 millones para programas de compensación y remediación, además de US$1.860 millones para cerrar otras represas.
La compañía cerró varias minas después de que la represa de Brumadinho colapsó y liberó un torrente de lodo tóxico que sepultó edificaciones cercanas, incluida la cafetería de la empresa, dejando al menos 237 muertos.
Además, presionada por fiscales debido a que no hizo lo suficiente para prevenir la catástrofe, Vale nombró a Eduardo Bartolomeo como presidente ejecutivo, en reemplazo de Fabio Schvartsman. La minera también incluyó un miembro independiente más en su directorio en los meses posteriores al colapso de la represa.
Primera caída
Vale, que había reportado una utilidad neta de US$1.590 millones en el mismo período del año pasado, también informó de una pérdida de US$652 millones antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización en el período, su primera caída trimestral según EBITDA.
Fuente: Reuters
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