Mejillones, la planta productora de ácido sulfúrico de US$200 millones que construye la empresa chilena Noracid en la II Región del país austral, iniciará operaciones a mediados de abril. La terminal tendrá capacidad para producir 720.000 toneladas anuales de ácido sulfúrico con 98,5% de pureza y abastecerá un mercado que ahora depende del ácido que producen las fundiciones Chuquicamata y El Teniente de la cuprífera estatal Codelco y Altonorte de Xstrata.
De acuerdo con Eduardo Simián, gerente del proyecto, la construcción de la planta, que se emplaza en la región donde se obtiene la mayor parte de la producción de cátodos de cobre del país, está casi terminada y actualmente se están llevando a cabo las pruebas de rigor a los procesos y a las instalaciones.
La terminal, cuya finalidad es la de asegurar el suministro de ácido sulfúrico para los diferentes proyectos mineros de la zona, tendrá una vida útil de 20 años y procesará pélets de azufre refinado que se importarán y transportarán a la planta desde el puerto aledaño de Mejillones.
Como subproducto, la planta producirá 24 MW de energía eléctrica a través de la puesta en marcha de una unidad generadora que reutilizará el calor generado en el proceso propio de producción del ácido. La energía será vendida a Minera El Tesoro, liberándola de su dependencia a la red del Sistema Interconectado del Norte (SING), y se adelantan negociaciones con Edelnor, empresa de energía chilena.
Noracid S.A. es un joint venture entre Inversiones Ultraterra (50%), parte de Ultramar Group, e Inversiones Belfi Ltda. (50%). Los equipos de producción del ácido son proveídos por la alemana Outotec y la construcción es realizada por Belfi, bajo la supervisión de Outotec.
MPA – Business News Americas
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