Durante una reciente visita a Japón, el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), Sergio Hernández, dijo que la inversión de ese país en la minería de Chile llegaría a US$10.700 millones hasta el 2023.
Firmas japonesas han participado por mucho tiempo de la minería chilena y la mayoría ha optado por adquirir participaciones minoritarias en proyectos importantes.
Sin embargo, un consorcio nipón, Lumina Copper Chile, optó por avanzar a toda marcha y desarrollar un proyecto minero por sí mismo: la mina Caserones, cuyos trabajos se completaron con éxito el año pasado.
Entre las participaciones destacadas se cuentan el 30% de Marubeni en Antucoya y el 20% que Sumitomo cuenta de Candelaria, adquirida recientemente por Lundin Mining y que recibirá una fuerte inversión durante los próximos años. El proyecto Candelaria 2030, de US$460 millones, busca extender la vida útil de la mina en al menos 13 años y contempla tanto ampliar el yacimiento a cielo abierto y dos depósitos de estériles como construir un nuevo depósito de relaves.
Imagen: Antofagasta plc
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