La escasez de recursos energéticos y acuíferos que sufren las instalaciones mineras del norte de Chile ha obligado al presidente de Codelco, Diego Hernández, a afirmar que la Fase II del Proyecto Sulfuros Radomiro Tomic podría utilizar agua de mar (como el resto de las instalaciones ubicadas en el norte del país), bien mediante una planta desaladora o bien mediante agua salada directamente en los procesos. Se espera que el proyecto, que está en etapa de factibilidad, pueda operar en 2017 después de una inversión de US$4.500 millones.
MPA
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