Peligros ocupacionales

Mié, 10/10/2012

El alto riesgo de las enfermedades pulmonares crónicas en los mineros de carbón representa un problema creciente

Por John W. Walsh*

Los mineros de carbón respiran excesivas cantidades de polvo en sus pulmones, lo cual puede desemboca en neumoconiosis o conocidas más comúnmente como Pulmones Negros. Mientras que la enfermedad del pulmón negro está creciendo entre los mineros de carbón, otra enfermedad que está representando una seria amenaza es la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

De hecho, es la tercera mayor causa de muerte en Estados Unidos. El Instituto Nacional de la Salud Estadounidense considera que la mitad de la población vive con esta enfermedad sin saberlo. Es la única gran enfermedad cuya mortalidad continúa aumentando. Si bien se cree que el tabaco es la principal causa de esta enfermedad, ciertos estudios demuestran que el 15 por ciento son casos relacionados con la vida laboral.

Una exposición prolongada al polvo de carbón puede crear la irritación continua y daños que provocan esta enfermedad, pudiendo provocar un enfisema. Además, se ha descubierto en nuevos mineros que suelen aparecer síntomas de bronquitos asociados con una caída rápida de la función pulmonar en el espacio de dos años posterior al inicio del trabajo en la mina.

Los síntomas de esta enfermedad incluyen una tos permanente o una que produce una gran cantidad de mucosa, generalmente conocida como la tos del fumador. También incluye escasez en la respiración, especialmente en actividad física, un pequeño silbido o ruido extraño producido cuando se respira y un sensación de dureza en el pecho.

Los síntomas pueden aparecer años antes de que empeore el flujo de aire dentro y fuera de los pulmones. Aquellas personas que sufren esta enfermedad pueden verse afectadas por infecciones bacteriológicas en episodios que afectan negativamente a la calidad de vida de los pacientes y presentan un costo económico.

Una vez se ha producido el daño por la enfermedad, este es irreversible. Sin embargo, se pueden tomar medidas para llevar una vida más confortable. Por ejemplo, las drogas broncodilatadoras pueden ayudar a relajarse y a abrir los pasadizos de aire en los pulmones. El ejercicio puede ayudar a fortalecer los músculos usados en la respiración, aspectos como dieta adecuada, peso correcto y ejercicio regular ayudan a reducir los efectos de la enfermedad.

Además, el uso de drogas esteroides puede ayudar a reducir la inflamación, especialmente si es aguda o se produce una infección. El tratamiento por oxígeno es de gran ayuda en casos avanzados. En los casos más extremos será necesario extraer quirúrgicamente las partes más dañadas del pulmón para permitir que funcionen mejor las partes restantes.

La mejor forma de evitar daños posteriores a los pulmones por polvo de carbón es el uso de máscaras protectoras y el trabajo en ambientes donde se controlan los niveles máximos de polvo. La exposición al polvo del carbón está asociada directamente con el enfisema tanto en fumadores como en no fumadores, según el Instituto Estadounidense de Salud y Seguridad Ocupacional (NIOSH, por su siglas en inglés), pero es importante que los mineros dejen de fumar para evitar daños adicionales.

El sector de minería de carbón emplea a siete millones de personas en todo el mundo, según NIOSH. Si bien se ha escrito mucho sobre las consecuencias ambientales de este tipo de minería, debería prestarse la misma atención a las consecuencias en la salud de los mineros. Desgraciadamente, los casos de Pulmones Negros han doblado durante la última década según el epidemiólogo Scott Laney de NIOSH. Tanto reguladores estatales como empresarios y mineros deben unir fuerzas para mejorar las condiciones de salud y proteger los pulmones para así beneficiar a las comunidades y a la industria.

*John W. Walsh es el co-fundador y presidente de la COPD Foundation, dedicada al desarrollo de planes de apoyo. Puede ser contactado en jwwalsh@copdfoundation.org

MPA

¡No se pierda ningún número! Subscríbase gratis a Mineria

Parte de Route One Americas

SUBSCRÍBASE HOY

Mineria Pan-Americana