La compañía minera Zaldívar, empresa conjunta de Antofagasta Minerals (AMSA) y la canadiense Barrick Gold, presentó un estudio de impacto ambiental (EIA) para extender las operaciones de su yacimiento de cobre que lleva el mismo nombre, ubicada en la Región de Antofagasta, en el norte de Chile.
El proyecto consiste en la continuidad operacional del proyecto Zaldívar al 2031, manteniendo la actual tasa de extracción de material de 260.000 t/d y la tasa de producción de 176.000 t/d para extender la vida útil de la mina, según el documento presentado.
En la iniciativa, la firma prevé invertir US$ 100 millones.
Cabe resaltar que en el proyecto se incluye modificaciones a obras que cuentan actualmente con aprobación ambiental, como la elevación del muro del Depósito de Relaves; aumento en la altura y capacidad del Botadero Principal; la ampliación de la Pila de Lixiviación Secundaria de Ripios (LSR); y la ampliación del Relleno Sanitario autorizado para Disposición Final de Residuos Sólidos Domésticos y Residuos Sólidos Industriales No Peligrosos.
Además, se considera extender la operación de extracción de agua desde el campo de pozos de Negrillar; y la extensión de vida útil de las demás actividades e instalaciones de la faena.
La minera detalló que la vida útil total del Proyecto es de 10 años, a partir del año 2022 hasta el año 2031. Los dos primeros años corresponderán a la fase de construcción de las obras necesarias para el proyecto.
Posteriormente, la fase de operación del proyecto tendrá una duración de 8 años, (2023 al 2030). En lo que respecta a la fase de cierre del Proyecto, se estima comenzarán a partir del año 2029 hasta el año 2031.
Fuente: BNamericas
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