Se concretó la adquisición del 30% de la compañía minera Quebrada Blanca por parte de Sumitomo Metal Mining y Sumitomo Corporation, informó la canadiense Teck Resources.
Quebrada Blanca es propietaria de la mina que lleva el mismo nombre y del proyecto de expansión `Quebrada Blanca Fase II` (QB2), ubicado en la región de Tarapacá, en Chile.
Teck explicó que tras el fin de la transacción, Teck mantendrá el 60% de la propiedad, Sumitomo el 30%, mientras que la estatal Enami seguirá con su participación del 10%.
"Se espera que Sumitomo Mining y Sumitomo Corporatios contribuyan con aproximadamente US$ 1.300 millones al proyecto QB2 durante 2019", añadió.
En esta línea, Teck aseguró que su inversión propia en el proyecto para 2019, de US$175 millones, ya fue desembolsada en el primer trimestre.
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"Si se asume el cierre durante 2019 del préstamo de financiamiento del proyecto por US$2.500 millones que se espera que se firme en el segundo trimestre, no se espera que se requieran más contribuciones en efectivo de Teck a QB2 hasta fines de 2020", explicó.
El proyecto QB2 demandará un costo de capital estimado de US$ 4.739 millones. El proyecto incluye la construcción de una concentradora de 143.000 toneladas por día e instalaciones relacionadas, que están conectadas a un nuevo puerto y a una nueva planta desalinizadora de 165 kilómetros de longitud y a tuberías de agua desalinizada.
La segunda fase del proyecto entrará en operación el 2021 y se espera tener una tasa de producción promedio anual de aproximadamente 316.000 toneladas de cobre los primeros cinco años. QB2 producirá concentrados limpios de cobre y molibdeno.
Asimismo, su vida útil es de 28 años. Aunque Teck ya ha revelado sus intenciones de avanzar hacia una tercera fase.
Fuente: BNamericas
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