Recientemente, el gobierno de Perú, encabezado por Ollanta Humala, lanzó medidas de estabilidad tributaria, es decir, convenios que garantizan que los tributos no sufrirán modificaciones por un plazo determinado. Si bien el objetivo era dinamizar las inversiones mineras, “podrían crear confusión e incluso discriminación en la industria, según tributaristas y empresarios”, informa el diario local El Comercio.
“El primer argumento en contra de las medidas es que levanta la valla del monto de inversiones y disminuye los plazos de los convenios vigentes, lo que beneficia, sobre todo, a la gran minería”, expresa el medio. “Así, aumenta en 10 veces la inversión inicial de aquellas operaciones cuya inversión mínima es de US$2 millones, y la pasa a US$20 millones”, consigna.
Mientras que en el caso de inversiones cuyo compromiso inicial es un mínimo de US$20 millones se ha elevado en cinco veces (a US$100 millones), y se reduce el plazo de la garantía, de 15 años a 12 años.
MPA