Minería brasileña: el auge apenas comienza

Las inversiones esperadas en los próximos tres años superan los US$ 68.000 millones
Por Walter Duer, Buenos Aires (Argentina)

La minería en Brasil está viviendo una etapa de auge. El Instituto Brasileño de Minería (IBRAM) estima que 2011 culminará con una producción record de US$50.000 millones, un 25% por encima de los US$40.000 millones de 2010. La mitad de ese total corresponde al estado de Minas Gerais, siendo Pará el otro estado que genera altos niveles de producción (28%).

Con estos datos puede concluirse que para este mercado se acabaron los coletazos de la crisis global de 2009, que repercutió fuertemente en el sector (había sufrido una caída de 14% respecto del período anterior).

La industria minera es clave para la economía brasileña: emplea 165.000 trabajadores. Además, el Ministerio de Minas y Energía estimó que por cada uno de los puestos directos de la industria se crean 13 puestos adicionales en algún punto de la cadena de valor, con lo cual más de 2 millones de brasileños se benefician con algún cargo relacionado con el mundo de la minería.

Las inversiones también están en alza: entre 2011 y 2015 alcanzarán los US$68.500 millones, de los cuales casi US$45.000 millones están destinados a incrementar la producción de hierro, que representa el 80% de lo que el país exporta en este segmento. Así, las 395 millones de toneladas de este año se convertirán en 771 millones para 2015. El oro ocupa el segundo lugar en exportaciones, con el 5.1% del total.

Algunas de las empresas más grandes que participan del negocio, entre las poco más de 7800 censadas por el DPNM (Departamento Nacional de Producción Mineral) son Vale (que es, por otra parte, la minera más grande de Latinoamérica, con ingresos anuales cercanos a los US$28.000 millones), Samarco Mineraçao, Paranapanema, Magnesita y Compañía Brasileira de Metalurgia e Mineraçao. También grupos multisector, como Votorantim, y las grandes siderúrgicas están aprovechando el boom, como CSN o la compañía de capitales de Luxemburgo, Arcelormittal, que realizó en el país la mayor inversión del grupo a nivel global en el segmento de aceros largos: US$1.200 millones en dos años para duplicar la capacidad de producción de una planta ubicada en Minas Gerais.

Respecto de Vale, la compañía está realizando fuertes inversiones tanto en la ampliación de plantas como en el desarrollo de redes logísticas para facilitar el transporte de los minerales. En este último grupo se encuentra, por ejemplo, la “ruta del hierro”, que une Vitoria con Minas en la región central de Minas Gerais.

El objetivo es anticiparse al incremento de la demanda y facilitar el movimiento de minerales desde una de las principales instalaciones de la empresa, Brucutu, con capacidad de producción de 30 millones de toneladas anuales.

La empresa, por otra parte, anunció un plan de inversiones de US$ 4.600 millones en la zona de Minas Gerais, en proyectos como Conceiçao Itabritos, para incrementar la capacidad de producción en otros 12 millones de toneladas y cuya entrada en operación se calcula para el segundo semestre de 2013.

No todo es color de rosa para la minera más grande: al final de 2011, sus inversiones previstas para el año habrán completado el 80% del total. El faltante se debe, principalmente, a atrasos en los proyectos como consecuencia de dificultades en la obtención de licencias ambientales.

El objetivo de Brasil a nivel país es aprovechar su amplísimo potencial de exploración, para poder hacer despegar el interés de los inversionistas internacionales. A pesar de la producción record de 2011, que espera superarse el año próximo, el total invertido en el país representa el 3% del total mundial. Si bien esa cifra lo posiciona en el décimo puesto del globo, junto con la Argentina, la intención es incrementarla en el mediano plazo.

MPA

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