Entre este fin de año y principios de 2025, Josemaría lanzaría la licitación para la primera de las grandes obras del proyecto. Se trata del camino nuevo que permitirá la construcción de la mina. Antes de esto, la empresa decidió hacer un aviso a las 14 cámaras de proveedores que existen en la provincia de San Juan para que estén listos cuando finalmente empiece la selección.
Desde la Cámara Argentina de la Construcción de San Juan aseguraron que el sector local “necesita conformar uniones transitorias de empresas (UTE)” para participar en la licitación, dijo el presidente de la institución, Ramón Martínez.
La estrategia de las empresas, que quieren trabajar juntas, apunta a que los futuros contratos tengan impacto en pymes, medianas y empresas mayores. Una alternativa es que se unan a otras firmas más grandes, aunque no sean de San Juan, para participar de las tareas de mayor complejidad. Pero, aseguró Martínez, buscarán que “sean empresas sanjuaninas las únicas que trabajen en el camino a Josemaría”.
El empresario explicó que las uniones transitorias permitirán que “empresas que tienen mayor capacidad u operatividad técnica sean las que comanden el trabajo desde el inicio”. Pero además, al encarar las tareas en conjunto, ven la “posibilidad de que entre 10 a 20 proveedores locales trabajen, aportando no solo la ingeniería, sino también los equipos técnicos y todo lo necesario para construirlo”, aseguró. Esta estrategia es algo que las constructoras y otras firmas locales vienen analizando, con el objetivo de poder captar la mayor cantidad de contratos que genere el proyecto de cobre, que desarrollarán en conjunto Lundin y BHP.
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Construcción del Corredor Norte
El Corredor Norte, como se llama el nuevo camino que planifica el proyecto, requerirá de un trabajo complejo en materia de ingeniería. Deben hacer un trazado de alrededor de 250 kilómetros desde Rodeo hasta donde se encuentra emplazado el proyecto.
Actualmente, la empresa llega al campamento a través de Guandacol, en La Rioja. Además, el Corredor Norte deberá permitir el tránsito pesado, para llevar al proyecto la maquinaria e infraestructura y luego para el uso en producción. A partir de esta obra, a su vez, podrán construir la línea eléctrica de 500 kV que va a la mina.
Para elegir las empresas que se hagan cargo de este desafío, Josemaría hizo primero esta invitación a las cámaras locales, que luego extenderá a las de todo el país. Tras eso elaborarán un listado de aquellas empresas que quieran participar para hacer un listado con las mismas y a partir de esto lanzarán la precalificación.
La precalificación es la etapa en la cual los futuros participantes deben demostrar que tienen la documentación necesaria y se encuentra en situación regular. El último paso será el llamado a licitación y concurso de precios de las obras, ya que harán el camino en etapas, empezando por los tramos más cercanos al actual campamento.
Fuente: Diario de Cuyo