La minera Antofagasta elevó el costo para la ampliación de la planta concentradora en su mina Centinela, en Chile, a USD 3.700 millones. Se trata de un aumento de USD 1.000 millones respecto a la estimación del estudio de prefactibilidad de 2015, que era de USD 2.700 millones, e incluye un nuevo sistema de agua y cambios de diseño.
La empresa decidirá a principios de 2023 si sigue adelante con la ampliación, que aumentará la producción en una media de 170 000 t/año de cobre equivalente y situará a Centinela en el primer cuartil de costos.
El proyecto Centinela tiene dos fases, la primera de las cuales será la concentradora de 95 000 t/d y la segunda una posible ampliación hasta 150 000 t/d de mineral. La segunda fase se abastecerá inicialmente del pozo Esperanza Sur, recientemente abierto, y posteriormente del pozo Encuentro.
El pozo Esperanza Sur contiene 1.400 millones de toneladas de reservas con una ley de 0,4% de cobre, 0,13 g/t de oro y 0,012% de molibdeno.
Antofagasta está estudiando la posibilidad de externalizar el suministro de agua para las operaciones actuales y futuras de Centinela. A finales de 2020 se inició un proceso de licitación para invitar a terceros a suministrar agua a la mina y se espera que el proceso finalice en el cuarto trimestre.
Antofagasta también ha aumentado recientemente la estimación del costo para la Fase 1 de su expansión de Los Pelambres de USD 1.700 millones a USD 2.200 millones. De este aumento, unos USD 220 millones están relacionados con el impacto de COVID-19 en los costos y el calendario de construcción y USD 170 millones con la inflación general.
Fuente: Mining Weekly