El presidente del directorio de la estatal chilena Codelco, Máximo Pacheco, junto al presidente ejecutivo, Rubén Alvarado, visitaron la División Salvador para evaluar en terreno los avances del proyecto Rajo Inca y anunciaron que este año comenzará su operación.
“Hemos revisado el estado de desarrollo y avance del proyecto, los riesgos que hemos enfrentado en su ejecución y las lecciones aprendidas. Necesitamos a este Salvador siendo exitoso con Rajo Inca, una iniciativa compleja y llena de desafíos, que ha presentado dificultades, pero las hemos ido superando”, comentó Pacheco.
El proyecto simplificará la operación minera de Salvador, cuyo mineral se obtenía de tres rajos y una mina subterránea, a una en la que todo el aporte de mineral provendrá desde sólo un rajo que cuenta con leyes de cobre superiores en un 40% a las actuales, todo lo cual influirá en el aumento de la producción y la productividad. De este modo, Rajo Inca, con un Capex autorizado de USD 2400 millones y un avance físico de 70% al cierre de 2023, permitirá extender la operación de la División Salvador por 47 años.
La iniciativa no sólo considera la puesta en operación de una nueva mina a rajo abierto, con un prestripping de 130 millones de toneladas, sino que también la construcción de varias otras obras. Entre ellas, la ampliación de la planta concentradora y la optimización de las actuales instalaciones, para llevar las líneas de chancado primario, secundario y terciario a una capacidad de procesamiento de 37 000 toneladas diarias; el mejoramiento en la canaleta de relaves y la construcción de nuevos muros del depósito en el lado sur, junto con al crecimiento de los ya existentes, además de un nuevo taller de camiones, entre otras instalaciones.
“El hecho de revisar en detalle y en terreno la realidad del proyecto y sus avances es muy útil para evaluar los riesgos y establecer la estrategia para controlarlos y mitigarlos. Hemos hecho mucho hincapié en el cumplimiento de nuestros compromisos”, agregó Rubén Alvarado. Además, destacó el trabajo conjunto de las áreas de la división y de la Vicepresidencia de Proyectos. “Lo hemos venido impulsando y es muy gratificante verificar en terreno que los equipos están trabajando muy afiatados y resolviendo con mucha cercanía los detalles que nos permitirán cumplir y echar adelante nuestro proyecto Rajo Inca”.
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Apertura de la mina y puesta en marcha de la concentradora
Acompañados del vicepresidente de Proyectos, Julio Cuevas, y del gerente general de Salvador, Christian Toutin, además de ejecutivos y trabajadores de la división, los máximos representantes de la Corporación recorrieron el área de la planta concentradora. Con 75% de avance, ya se entregó el área de descarga de camiones, se montó el edificio de encapsulamiento y se inició el montaje de la línea superior de tolvas de descarga, todo lo cual habilita la continuidad de la construcción del chancador primario de sulfuros, para empezar el procesamiento de 10 000 toneladas diarias al inicio y que alcanzará las 37 000 toneladas.
Luego, se trasladaron hasta el sector mina, donde observaron el progreso del prestripping, que ya acumula el movimiento de 80 millones de toneladas secas de roca del total de 130 millones contemplado, cifra que se presupuesta conseguir entre mayo y junio de este año, fecha en la que se estima la apertura de la nueva mina rajo.
En el barrio cívico visitaron los camiones de extracción (CAEX) reacondicionados, la mayoría provenientes de Chuquicamata, y que operarán en Salvador, donde también se construyó un nuevo taller de camiones, que cuenta con una estación de lavado, otra de lubricado y una de microfiltrado; un alza tolvas y una sala eléctrica, entre otras obras de infraestructura.
Christian Toutin remarcó que la visita “es un tremendo impulso para nosotros, una gran inyección anímica para cumplir nuestras metas, hacernos cargo de entregar en mayo próximo, los primeros minerales en el chancador para iniciar la puesta en marcha de nuestra planta concentradora y, durante el segundo semestre, producir lo que necesitamos para alimentar la fundición de Potrerillos”.
Pacheco también destacó lo que significará el proyecto para Salvador. “La división tiene una larga historia, con una cultura e identidad propias, forjadas por los grandes desafíos que siempre ha enfrentado. Es el único campamento minero que queda en Chile y es una división que a lo largo de sus 52 años en Codelco ha contribuido con más de cinco mil millones de dólares en aportes al Fisco”, resaltó.