Las medidas en el acuerdo están asociadas a la recuperación del acuífero y bofedal Lagunillas.| Crédito: Primer Tribunal Ambiental
El Primer Tribunal Ambiental aprobó el acuerdo de conciliación en el marco de la demanda por daño ambiental en contra de la compañía Minera Cerro Colorado. La demanda fue presentada por Luis Jara Alarcón debido a la extracción de agua que realizó minera en el acuífero Lagunillas sin la autorización ambiental requerida.
La conciliación a la que llegó la empresa y el demandante contempla seis medidas que deberán ser ejecutadas por la minera con acciones que alcanzan los USD 18 millones.
Los ministros Alamiro Alfaro Zepeda, Cristián López Montecinos y Juan Opazo Lagos aprobaron la propuesta presentada luego de una exhaustiva revisión asociada al estándar científico jurídico que obliga el artículo 44 de la Ley 20.600.
“Todas estas medidas permiten, en su conjunto, la recuperación del acuífero Lagunillas, así como la protección de su ecosistema, compensando la pérdida en la captura de carbono que tuvo el bofedal del mismo nombre y añadiendo, como ganancia ambiental, la puesta en valor de otro humedal altoandino equivalente”, explicó el ministro Alamiro Alfaro Zepeda.
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Acuerdo
El acuerdo se produjo gracias a la actuación como amigable componedor del ministro en ciencias Cristián López Montecinos, quien fue encomendado por el tribunal para liderar la construcción final del documento preliminar presentado por la empresa y el demandante, con el objeto de mediar para alcanzar el estándar que la ley exige en este tipo de procesos judiciales.
La implementación de esta conciliación permitirá la recuperación del acuífero y del bofedal; así como también la compensación de componentes ambientales, servicios ecosistémicos y puesta en valor de un humedal altoandino. Esto porque se restringe la extracción de agua, se adoptan acciones para disminuir la incertidumbre respecto al tiempo de recuperación del nivel del acuífero y se actualizará el manejo a largo plazo que la minera realizará en el sector.
Además, y de manera innovadora, se establecen medidas para compensar los flujos de carbono que fueron generados y aquellos que no fueron captados debido a la afectación de este ecosistema altoandino, lo que sería un aporte desde la judicatura ambiental a la gestión de Gases de Efecto Invernadero del país.
Entre las medidas más importantes se encuentra la contribución que se hará para la conservación de otro humedal altoandino con características similares o equivalentes al bofedal Lagunillas, que se ubique preferentemente en la Región de Tarapacá, lo que permitirá mejorar un ecosistema adicional.
Por último, se aprobó la difusión de los estudios que se lleven a cabo para la implementación de todas las acciones con el fin de contribuir al conocimiento científico y a la educación ambiental.
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