El Gobierno de Estados Unidos está estudiando la posibilidad de conceder un préstamo de hasta USD 550 millones para contribuir al desarrollo de una mina de níquel y cobalto en el nordeste de Brasil.
Brazilian Nickel recibió una carta de la Corporación Financiera Internacional para el Desarrollo de EE.UU. (DFC, por sus siglas en inglés) en la que expresa su interés en respaldar el proyecto Piauí Nickel. La empresa espera convertir la carta de interés en una línea de financiación comprometida a principios de 2025. El importe representa casi el 40% del paquete global de financiación del proyecto, informó en un comunicado.
El movimiento se produce cuando EE.UU. se apresura a asegurar minerales críticos para reducir la dependencia de China, que domina la cadena de suministro de muchos metales clave, incluidos los necesarios para la transición energética. Piauí “representa una oportunidad para avanzar en el desarrollo de minerales críticos en Brasil, diversificar las cadenas de suministro críticas y fomentar el crecimiento económico en la región”, dijo en un comunicado Danielle Montgomery, vicepresidenta en funciones de infraestructura y minerales críticos de DFC.
Está previsto que el proyecto produzca 27 000 toneladas métricas de níquel y 900 toneladas métricas de cobalto al año durante los 10 primeros años de funcionamiento. En septiembre, el CEO de Brazilian Nickel, Mark Travers, antiguo responsable de metales básicos del gigante minero Vale, se mostró «muy optimista» sobre la posibilidad de tener un proyecto totalmente financiado en 2025, con una primera producción prevista para 2028.
Brazilian Nickel forma parte de la cartera de la empresa de metales para baterías TechMet, que cuenta con DFC entre sus accionistas. La empresa invierte en activos que producen, procesan y reciclan minerales esenciales para la industria de los vehículos eléctricos y la transición energética.
Fuente: Reuters