Décadas de investigación en torno a la innovación de equipos y tecnologías, le han permitido a la empresa sueca estar presente con sus soluciones en automatización y digitalización, en distintas operaciones mineras alrededor del globo. El uso de tecnologías de automatización y digitalización en minería subterránea es una realidad. Hoy es viable ver en grandes faenas mineras alrededor del mundo, aplicaciones robotizadas de carga y acarreo para minería subterránea, sumado a la recolección de datos de equipos como palas, camiones, perforadores y jumbos. El foco principal de emplear estas tecnologías es poder reducir los costos e incrementar la productividad y eficiencia.
En este sentido, la tecnología de automatización y digitalización que por años ha investigado Sandvik, hoy se encuentra presente y siendo aplicada a nivel de industria en numerosas minas alrededor del orbe. Importantes beneficios, tanto desde la perspectiva de la eficiencia de costos como de mejoras de seguridad en áreas tradicionalmente peligrosas para los operadores, son parte de la minería inteligente que hoy se consolida en Chile y el extranjero.
Transformación digital
La tendencia mundial indica que la demanda de tecnologías de Automatización y Manejo de Datos, por parte de las compañías mineras se ha incrementado. “Hace 10 años la tecnología estaba, no al nivel de ahora, no obstante hemos observado que en los últimos años las grandes empresas mineras han tomado en sus manos el tema de la automatización. Los factores son varios: leyes de los minerales menores, las minas cada vez están más profundas por lo que el costo del transporte aumenta, sumado a temas ambientales. Frente a este escenario, es que hoy estamos convencidos de que para aumentar la productividad, seguridad y rentabilidad de las operaciones mineras, la solución va de la mano de la aplicación de digitalización y automatización”, señala a Revista Minería Pan-Americana (MPA), Patricio Apablaza, Vicepresidente del Área de Ventas Andean & South Cone de Sandvik Mining and Rock Tecnologhy.
Durante 156 años la firma sueca ha mostrado un crecimiento sostenido de sus soluciones. En esa línea Sandvik ha desarrollado dos pilares estructurales en torno a estas tecnologías: uno es el manejo de datos y digitalización, y la automatización propiamente tal. “Los principales desafíos para la implementación de estas soluciones están en la implementación de redes inalámbricas o wifi en muchas de las minas subterráneas de mediano y pequeño tamaño, implementación que facilitaría enormemente la factibilidad de automatizar los procesos. Otro gran desafío es la interoperabilidad, que hoy en día está relativamente resuelta a nivel de recolección y gestión de datos, pero no así a nivel de automatización”, destaca el ejecutivo de Sandvik.
Por último, el desarrollo definitivo de la electromovilidad permitiría prescindir de motores de combustión interna y así avanzar un paso radical en el uso de tecnologías amigables con el medio ambiente.
A nivel global, Australia, Canadá, Suecia y Sudáfrica lideran la transformación digital en minería, mientras que en Sudamérica Chile es el país con mayor avance. El mayor potencial en la región se presenta en Chile y Perú, dónde se hace fundamental desarrollar una propuesta de valor para la mediana y pequeña minería subterránea, las más representativas en esos países.
El futuro de la minería inteligente irá mucho más allá de que un equipo se mueva solo. “Queremos mostrarles a nuestros clientes que el automation no solo es equipos, sino que la gestión de los datos puede ser incluso más beneficiosa debido a que justamente impacta en el core business de las compañías”, destaca Patricio Apablaza
En este camino tecnológico, que ya suma décadas de trabajo e investigación, la empresa ha desarrollado la plataforma Optimine, que apunta a brindarle la inteligencia a la mina. “Hoy podemos transformar un ambiente subterráneo hostil, en un modelo digital dinámico, visualizando a las personas, equipos, variables de temperatura, ventilación bajo demanda, semáforos, dispositivos de seguridad, entre otros datos y, sumado a eso, darle inteligencia a los equipos”, comenta el ejecutivo de Sandvik.
Con una mirada de futuro, la firma ya se encuentra trabajando en lo que será la electrificación de equipos. “De aquí a diez años probablemente el motor diésel quedará obsoleto, los equipos serán eléctricos y Sandvik está haciendo una inversión fuerte para desarrollar máquinas que funcionen totalmente autónomas con baterías”, complementa.
Presencia en Sudamérica
La gerencia regional de Sandvik está basada en Chile, el área que abarca es la región Andina y el Cono Sur; mientras que el área de venta la componen “Argentina, Chile, Perú y Colombia, en los cuales operamos directamente a través de Centros de Servicios, oficinas Administrativas y Centros de Distribución para nuestros productos”, detalla Apablaza.
Como primicia, el ejecutivo adelanta que “el mercado minero ecuatoriano ha crecido de manera muy prometedora en los últimos años, por lo cual esperamos pronto abrir operaciones en ese país, actualmente Ecuador y Bolivia lo cubrimos por intermedio de distribuidores. En tanto en Sudamérica, Brasil es un área de venta independiente”.
Los principales mercados para Sandvik en Automatización son Australia, Canadá, Sudáfrica y Chile, en este último mercado la demanda se ha incrementado fuertemente gracias a los proyectos de automatización en curso por Codelco El Teniente y Chuquicamata Subterránea.
En Sudamérica los principales proyectos son la automatización del primer macrobloque en la mina Chuquicamata Subterráneo, sistema que estará funcionando a mediados del próximo año. Además, está Codelco Teniente con pruebas de operación autónoma para camiones, también con planes de estar habilitado a fines de este año. Otra faena es CEMIN, mina de tamaño mediano, de capitales privados que ha apostado por tener todo su proceso completamente automatizado durante el 2019, y finalmente Cerro Negro en Argentina, quienes usan OptiMine y próximamente habilitarán AutoMine para sus LHD.
Centros de Servicios
Parte de la estrategia de la compañía ha sido la de incrementar “la satisfacción de nuestros clientes, para lograrlo estamos desarrollando diversas iniciativas. Desde el 2017 empezamos un plan estratégico que apunta a estar más cerca de nuestros clientes, con infraestructura en torno a Centros de Servicios como los que estamos desarrollando en Calama y en Copiapó (Chile), este último en proceso. En Argentina inauguramos recientemente un Centro en el sur del país, en Colombia uno en Medellín, en Perú un centro a las afueras de Lima. El plan es desarrollar Centros de Servicios para soportar de mejor forma los requerimientos de nuestros clientes”, señala Patricio Apablaza.
Recientemente en Chile se inauguró el Centro de Servicios de Calama. “Este centro de servicio nos acerca a los clientes y crea muchas oportunidades nuevas con relaciones más cercanas de cara a las necesidades de los cliente. Al mismo tiempo aumenta considerablemente la flexibilidad de servicio y atención, menores tiempos de entrega en los suministro de partes y componentes originales y mejor disponibilidad de la atención en terreno con personal técnico especializado. Contratos de Servicios, de entrenamiento en operaciones y mantenimiento”, concluye Apablaza.